Durante el ya tradicional Encuentro Anual de la Academia Americana de Alergia, Asma e Inmunología (AAAAI), realizado en al ciudad de Houston, Texas, Estados Unidos, se revisó al conferencia: Omalizumab en el tratamiento del asma moderada y severa en la población pediátrica, adolescente y general.
El asma afecta a una cantidad importante de niños y es una de las causas principales de hospitalización en la población pediátrica seguida por bronquiolitis y neumonía. En un estudio cruzado en 42 hospitales, se afirmó que el asma es el mayor motivo de visitas con un total de 22 186 pacientes pediátricos. Quienes padecen asma severa, soportan la carga de inflamación crónica de las vías aéreas, hiperrespuesta de las vías aéreas y limitación reversible del flujo aéreo lo que provoca una cantidad significativa de exacerbaciones, hospitalizaciones y visitas al servicio de emergencias.
Por lo general, las dosis bajas a intermedias de corticosteroides inhalados son suficientes para controlar los síntomas de asma en la mayoría de los niños. Sin embargo, aproximadamente el 5% restante de los niños con asma severa presentan síntomas continuos a pesar del tratamiento con dosis altas de corticosteroides inhalados (CEI) y corticosteroides orales (CEO). Los corticosteroides inhalados u orales se recomiendan como el tratamiento de primera línea, con una segunda estrategia que combina Beta-agonistas de acción prolongada como un fármaco adicional. Sin embargo, estudios han revelado que el uso prolongado y las dosis altas de corticosteroides inhalados y corticosteroides orales pueden provocar efectos adversos como insuficiencia adrenal, retardo del crecimiento y osteoporosis.
Los riesgos de insuficiencia adrenal, retardo del crecimiento y osteoporosis son complicaciones serias para los niños ya que sus cuerpos están bajo un desarrollo significativo. La insuficiencia adrenal es un estado de salud donde la glándula adrenal es incapaz de producir una cantidad suficiente de cortisol que puede provocar dolor repentino en piernas, abdomen y zona lumbar, vómitos y diarrea que producen deshidratación, hipotensión. Este estado, si no se trata, puede provocar otras enfermedades y en el peor de los casos, la muerte.
Los niños que reciben dosis altas de corticosteroides inhalados diarios durante 7-12 meses por lo general presentan reducción del crecimiento que como consecuencia afectará su altura adulta final. Un estudio clínico reveló que los primeros dos años de tratamiento con corticosteroides inhalados diarios, generaron una disminución de 0.1 cm en la altura por cada incremento de 1 mcg/kg de peso corporal. Más de 3000 niños con asma leve participaron de estudios de budesonida, los que demostraron una disminución en la velocidad de crecimiento que fue más marcada durante los primeros dos años de tratamiento.
La osteoporosis causa una reducción de la densidad mineral ósea que provoca un riesgo incrementado de fractura y fragilidad ósea. Un estudio grande de control de casos, en niños entre 4 y 17 años, indicó que hubo un mayor riesgo de fractura ósea asociada con 4 o más ciclos de esteroides orales por año.
Omalizumab es un anticuerpo monoclonal humanizado, aprobado para el tratamiento del asma alérgica persistente moderada a severa, en adultos y niños mayores de 6 años de edad. Omalizumab forma complejos con la IgE libre circulante para evitar que la IgE se una a los receptores en la membrana celular. Esta acción, por lo tanto, impide el reconocimiento de un alérgeno y evita el inicio de la cascada alérgica.
Se ha demostrado que omalizumab reduce significativamente la incidencia de exacerbaciones y mejora el control de los síntomas de asma. Como un medicamento de mantenimiento, omalizumab se usa en conjunto con otros medicamentos para el asma como corticosteroides inhalados, inhibidores de leucotrienos y corticosteroides orales. Muchos pacientes son capaces de reducir el uso o la dosis de otros medicamentos para el asma después de iniciar el tratamiento con omalizumab.
En varios países, omalizumab está indicado para adultos y adolescentes ( mayor o igual que 12 años de edad) con asma alérgica persistente moderada a severa y en otros como en la Unión Europea, omalizumab se ha aprobado para niños (6-11 años de edad). Se dispone de muy pocas opciones terapéuticas para la población pediátrica con asma severa y estos casos demuestran que la intervención temprana con omalizumab puede ser una opción terapéutica efectiva para tratar el asma moderada a severa así como también para evitar o revertir el daño provocado por el uso prolongado de otros tratamientos.
Se realizó una revisión retrospectiva de las historias clínicas de la base de datos de la Allergy and Asthma Clinic canadiense de atención terciaria. Se evaluaron los pacientes menor o igual que 17 años de edad que recibieron tratamiento con omalizumab. Se identificó un total de 12 pacientes menor o igual que 17 años de edad al inicio del tratamiento. Se obtuvieron los datos de VEF1, uso de corticosteroides inhalados, uso de corticosteroides orales y exacerbaciones de asma, que incluye hospitalizaciones, visitas al servicio de emergencias y dosis de ataque de corticosteroides orales. Los datos se recolectaron al comienzo del tratamiento (basal) y en intervalos específicos durante todo el tratamiento. La media de la edad de los 12 pacientes, al momento del inicio del tratamiento, fue 13 años. De los 12 pacientes, 9 son masculinos y 3 femeninos.
La duración del tratamiento oscila de 9 meses a 8 años y 2 de los pacientes habían recibido solamente 9 meses hasta la fecha. Aunque uno de los dos pacientes todavía está bajo tratamiento, el otro paciente lo interrumpió después de 9 meses debido a cuestiones financieras.
Hubo una mejoría gradual en los resultados del VEF1 en el mes 9 acorde a lo comparado en el basal.
Se observó una disminución en la media de la dosis diaria de corticosteroides inhalados después de un período de tratamiento de 9 meses. Hubo aproximadamente una caída del 55% en el nivel promedio de dosis de corticosteroides inhalados en los pacientes pediátricos en comparación con el basal.
Esta disminución en la dosis de corticosteroides inhalados en el mes 9 representa una disminución del 25% en cada uno de los niveles de dosis diarias baja e intermedia y una disminución del 75% en la dosis diaria alta. Los resultados también indican que un 42% de los pacientes pediátricos lograron controlar su asma sin la necesidad de ningún corticosteroide inhalado en el mes 9 de tratamiento.
La media y la dosis diaria de corticosteroides inhalados, así como también los niveles de dosificación se determinaron usando dosis diarias equipotentes estimadas de glucocorticosteroides inhalados para adultos (más de 12 años de edad) y niños ( mayor o igual que 12 años de edad) de la Global Strategy for Asthma Management and Prevention.
Para los pacientes que toman corticosteroides orales diarios, los resultados indican una disminución de la dosis diaria basal después de 9 meses de tratamiento. Hubo una disminución del 76% comparado con el basal en el nivel promedio de dosis de corticosteroides orales.
La cantidad promedio de exacerbaciones se redujo después de 1 año de tratamiento.
Un paciente dio su consentimiento para completar un cuestionario de calidad de vida (QoL). El Pediatric Asthma Quality of Life Questionnaire (PAQLQ), con actividades estandarizadas usando una escala baja de 1 a alta de 7, se completó en el basal y mensualmente durante un año. En el basal, el puntaje de calidad de vida del paciente fue de 4.7, después de un año de tratamiento con omalizumab había aumentado a 7.
Conclusiones
El tratamiento temprano del asma moderada a severa con omalizumab en pacientes adolescentes/pediátricos puede mejorar su calidad de vida y ayuda a evitar las cuestiones de salud asociadas con los efectos secundarios de dosis altas o uso prolongado de corticosteroides inhalados y corticosteroides orales en los niños en edad de crecimiento.
También sería beneficiosa la evaluación habitual del régimen de tratamiento para asegurar el uso de la menor dosis efectiva de corticosteroides y la consideración de otros tratamientos.