Los nuevos avances en microelectrónica le han permitido a los médicos vislumbrar el día en que serán capaces de controlar y tratar a sus pacientes con implantes médicos que usan wi-fi, bluetooth, y otros tipos de tecnología inalámbrica.
Con el uso de esta tecnología los médicos serán capaces de ajustar el tratamiento de sus pacientes mediante un ordenador o teléfono. Los pacientes serán libres de tener que recordar tomar sus medicamentos y evitarán el dolor de las inyecciones múltiples. Durante la última década, los fabricantes de dispositivos han incorporado sustancias químicas o medicamentos en los implantes médicos con el objetivo de mejorar la eficiencia y reducir la morbilidad.
Implante fármaco inalámbrico
En los seres humanos ha sido probado con éxito un implante que se puede programar de forma inalámbrica y libera fármacos dentro del cuerpo.
Los investigadores señalan que el dispositivo podría salvar a los pacientes de un doloroso ritual de inyecciones diarias. El implante de microchips permite el control activo de la dosis del fármaco a través de una programación inalámbrica, cuyo funcionamiento fue testeado en el ensayo.
También es posible tener una farmacia completa en un chip, liberando diferentes fármacos cuando sean necesarios. Microchips está buscando incorporar sensores en los implantes que les permitan responder a los cambios metabólicos, tales como las variaciones en los niveles de glucosa en sangre.
Medicina 2.0
Los médicos pueden utilizar los teléfonos inteligentes para monitorear continuamente los signos vitales de los pacientes que viven en diferentes ciudades. Una sofisticada aplicación de smartphones utiliza un sensor de ultrasonidos inalámbrico que le permite a los médicos monitorear las válvulas cardíacas y evitar las costosas imágenes hospitalarias que se requieren habitualmente.
Fuente: ICTpost