No se observó un aumento en el riesgo con el uso de bloqueadores de H2.
En adultos estadounidenses con enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE), el riesgo de infarto al miocardio aumenta ligeramente entre los usuarios de inhibidores de la bomba de protones, según una revisión publicada en línea el 10 de junio en PLOS ONE.
John Cooke, M.D., Ph.D., presidente de ciencias cardiovasculares del Houston Methodist Research Institute, y sus colegas examinaron más de 16 millones de documentos clínicos de 2.9 millones de individuos. Los autores buscaban evaluar la asociación entre el uso de IBP y el riesgo cardiovascular en la población general.
En general, los usuarios de inhibidores de la bomba de protones tuvieron un 16 por ciento más de probabilidades de sufrir un infarto al miocardio que los pacientes con ERGE crónica que no tomaban el medicamento. Los autores del estudio notaron que los bloqueadores de H2 no se relacionaron con ningún aumento en el riesgo de infarto al miocardio.
Cooke dijo a HealthDay que las recientes investigaciones de laboratorio sugieren que los inhibidores de la bomba de protones pueden interferir con la función normal de los vasos sanguíneos, un mecanismo potencial por medio del cual los medicamentos podrían afectar el riesgo de infarto al miocardio.
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Actualizado: miércoles 9 de diciembre de 2015 (HealthDay News).
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