WSPID 2011: Implicaciones de los datos de eficacia disponibles y el impacto de las vacunas neumocócicas conjugadas
En noviembre se desarrolló en Melbourne (Australia) la séptima versión del World Congress of the World Society for Pediatric Infectious Diseases. En la cita se abordaron las implicancias de datos de eficacia y el impacto de las vacunas neumocócicas conjugadas en la práctica clínica.
La carga total de la enfermedad neumocócica en niños es muy elevada, y existe relación inversa entre la severidad de los cuadros y su frecuencia.
Así, la meningitis, que es la más grave de las ENI, es, afortunadamente, la menos frecuente; y con incidencia anual en Estados Unidos de 7 a 10 casos por 100.000 habitantes en niños <2 años.
En la actualidad existen muchos datos que soportan la eficacia de las vacunas neumocócicas conjugadas. En ENI, la VNC-7 y la VNC-9 han demostrado claramente su eficacia; mientras que con las VC-PHiD y VNC-13 no se realizaron estudios de eficacia, sino ensayos basados en correlatos de inmunogenicidad.
En la neumonía, la eficacia fue demostrada con VNC-7, VNC-9 y VC-PHiD. En la OMA se demostró la eficacia con VNC-7 y VNC-11 (precursora de VC-PHiD), recordando que, tal como se demostró en el estudio POET; la adición de serotipos no fue la única causa del elevado incremento de la eficacia, en comparación con la VNC-7.
Tal como ya fue señalado, la efectividad de una vacuna es mucho mayor que sus efectos directos.
La eficacia se evalúa a través de los estudios clínicos aleatorizados, y en el caso de las VNC ha sido claramente demostrada una significativa protección contra las infecciones producidas, tanto por los serotipos vacunales como por los serotipos relacionados.
Por otra parte, la efectividad de las vacunas se analiza a través de estudios ecológicos que investigan los efectos indirectos asociados con la disminución de la transmisión de los serotipos incluidos en la misma (efecto de rebaño), así como los eventuales incrementos vinculados con el aumento de la transmisión de los serotipos no incluidos (efecto de reemplazo).
La variabilidad de las poblaciones estudiadas y las diferencias en los diseños de los estudios realizados determinan que sea muy compleja la comparación entre los distintos ensayos y sus datos de eficacia.
A eso hay que sumar los efectos indirectos de las vacunas (efectos de rebaño, efectos de reemplazo, variación en los objetivos de eficacia).
Por lo tanto, los costos, la disponibilidad y la potencial protección contra los múltiples patógenos deben ser de una consideración importante cuando se discute la implementación de los programas nacionales de inmunización.
En conclusión, los estudios de eficacia y efectividad proveen una información importante y variada en relación con el impacto de las VNC sobre las ENI, la neumonía y la OMA.
El impacto de las VNC sobre la enfermedad neumocócica ha sido demostrado. Sin embargo, es muy complejo comparar resultados entre diferentes estudios y las distintas vacunas.
Las enfermedades neumocócicas todavía representan una elevada carga de enfermedad. Es necesaria la vacunación masiva con las VNC para reducir las tasas actuales de morbilidad y mortalidad.
El impacto de las vacunas neumocócicas conjugadas va a ser muy relevante, en especial en los países en desarrollo. Como ejemplo se pueden observar los resultados de una experiencia llevada a cabo en el distrito de Kilifi , en Kenia, donde se comenzó a inmunizar con VC-PHiD en enero de 2011.
Si bien el 70% de los niños menores de 5 años recibió una dosis de la vacuna, sólo al 30% se administraron dos dosis, y apenas el 15% completó tres dosis.
Sin embargo, a pesar de esa baja tasa de cobertura, la incidencia de ENI en esa comunidad en 2011 se redujo significativamente.
